El rudo tratado de Diddy
El empresario y músico Sean “Diddy” Combs, arrestado recientemente acusado de tráfico sexual y extorsión, enfrenta condiciones de encierro despiadadas en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn.
Según fuentes, Diddy ha sido asignado a la Unidad de Vivienda Especial (SHU), una habitación pequeña sin ventanas, de menos de 10 x 10 pies, donde duerme en un piso de concreto y pasa las noches “esquivando ratas”.
Aunque sus abogados han solicitado un traslado, Diddy sigue encerrado en el SHU, donde “no tiene libros, ni televisión y privilegios mínimos”, según una fuente.
Además, según la periodista independiente Jessica Reed Krauss, Diddy “no puede ser incluido en la población general porque probablemente lo matarían”. Esto se debe a que el rapero teme que los funcionarios penitenciarios hayan estado manipulando su comida, lo que lo lleva a dejar de comer.
“Los guardias supuestamente están manipulando su comida, lo que le lleva a dejar de comer”, escribe Krauss, “no por la calidad, sino por miedo a que esté contaminada”.
Krauss también afirma que Diddy ha dejado de comer porque teme que los guardias hayan estado mezclando su comida con heces humanas, y que esto lo hace sentir “asustado y desesperado”.
En medio de esta situación, TMZ ha refutado la afirmación alimentaria, afirmando que Diddy está “comiendo normalmente”.
La acusación contra Diddy contenía acusaciones impactantes sobre fiestas sexuales salvajes en su casa, que involucraban actos sexuales forzados y fueron grabados en vídeo.
En las semanas posteriores a su arresto, Diddy fue demandado por otro acusador, quien afirma que él la violó y la dejó embarazada.
No es probable que Diddy encuentre mucha simpatía entre el público en general, a pesar de las supuestas condiciones de su encierro.